Cuando decimos El mar está tranquilo es porque vemos que su superficie está en calma, sin mucho oleaje, como una alberca decimos. Lo que sucede es que en ese momento no experimenta esos pequeños cambios casi espásticas, pero rítmicos que llamamos olas. Sin embargo, el mar está involucrado en un movimiento mucho mayor. Se retira de una costa, pero crece en otra. Movilizando enormes cantidades de agua y energía por todo el planeta. Pero ponemos el foco en las olas
Emilie Delcourt
@EmilieD · 1:00
Me encanta la idea del verdadero estado del mar. No como un verdadero ánimo del mar o alma o llámalo como quieras. No, pero este concepto es muy bonito y de lo que hablas, pues es muy bonito. Claro, el mar y todos los metáforas que se puede usarlo con la idea del mar. Pero bueno, más me llamó la atención y que me gustó. No me gustó mucho como pensar cómo es realmente el mar?
Pablo Motl
@PabloMotl · 1:38
Gracias. Gracias por tomarte el tiempo para escuchar y leer y sumando a tus pensamientos. Pues al final el mar es todo. No es lo que vemos. Y es lo que no vemos. Es lo que siempre ha sido. Y es lo que es. Y es lo que fué. No igual que todas las cosas y todos los seres. Nosotros somos lo que somos, lo que ven y somos lo que no ven. Pero al final somos nosotros
Swell Team
@Swell · 0:15
Grace Suarez
@sualibros · 0:32
Hola. Buenas tardes, pablo. Quería comentar sobre tu alegoría con respecto al mar, a sus profundidades, a sus olas, a su falta de olas, a la adentro, al afuera. Estoy totalmente de acuerdo con lo que decís. Nos vamos alejando cada vez más de nosotros pensando más en las olas que en la profundidad. No te la dejo mucho. Tu comentario, que me hace pensar mucho, simplemente eso. Gracias,